Me gusta fotografiar momentos sencillos pero cargados de emoción. Para mi una boda no es sólo captar una fotografía bonita, es mucho más, es capturar el momento, la emoción, la alegría, los nervios y miles de sensaciones que escapan a la vista.

Me gusta conocer antes a la pareja, y así el día de la boda todo sea muy natural. Prefiero el trato personalizado para generar confianza y seguridad para que el día de la boda se desarrolle en un ambiente familiar y cercano.

Lo único que les pido a mis parejas es que sean ellos mismos, que disfruten del día de su boda y de cada momento, del resto me encargo yo.